La Confederación Intersindical Galega (CIG) insta al recién formado gobierno de la Xunta a demostrar «valentía política» en el ámbito industrial y el empleo

Cientos de personas han marchado por las calles de Santiago de Compostela, convocadas por el sindicato CIG-Industria. Durante la manifestación, el secretario nacional de dicho sindicato, Xoán Xosé Bouzas Aboi, ha hecho un llamamiento al próximo gobierno de la Xunta para que muestre «valentía política» en materia industrial y de empleo.

Los manifestantes, que partieron del céntrico paseo de la Alameda, recorrieron varias calles para expresar su reclamación del mantenimiento del empleo y contra la desindustrialización.

La Xunta «no puede estar a expensas de lo que le digan las grandes eléctricas» u otras potentes industrias, comentó Bouzas Aboi a un grupo de periodistas al inicio del recorrido.

El líder sindical señaló que existen «incertidumbres» acerca del futuro de varios sectores y de algunas fábricas importantes, como las de las multinacionales Stellantis en Vigo, Alcoa en San Cibrao (Lugo) o Endesa en As Pontes (A Coruña). Asimismo, hizo un llamado al futuro gobierno autonómico para que realice una «planificación adecuada» que aborde estos desafíos.

Destacó que la convocatoria de la manifestación por parte de CIG-Industria se realizó bajo la expectativa de que el nuevo gobierno de la Xunta ya hubiera sido nombrado, considerando las elecciones del 18 de febrero pasado. Sin embargo, el conocimiento sobre este nuevo gobierno no se dará hasta el domingo de la próxima semana (14 de abril), cuando se espera que Alfonso Rueda será reinvestido como presidente en la Cámara autonómica el jueves 11 y oficialmente tome posesión del cargo el sábado 13 de abril.

Respecto al proyecto de la empresa portuguesa Altri de instalar una fábrica de fibras textiles en el municipio lucense de Palas de Reis, reprochó que se trata de una «industria de enclave», como se denomina a las que fabrican productos poco elaborados, generalmente en países en desarrollo, para mercados globales.

En ese sentido, consideró que la Xunta se equivocó al evaluar el proyecto como «estratégico» y lamentó que la empresa haya estado «ocultando información durante todo este tiempo» sobre las verdaderas intenciones de sus actividades, ya que el proyecto incluiría también una macrocelulosa.