18 junio, 2024
En un monasterio de San Martín Pinario ubicado en el corazón de la capital compostelana, se alza un pabellón historicista que acaba de ser reabierto al público tras ser sometido una extensa y meticulosa rehabilitación. Este emblemático edificio, que data del siglo XIX, ha sido transformado en un moderno centro cultural tras una intervención financiada por las administraciones públicas e inaugurada este martes por representantes del Gobierno central, la Xunta de Galicia y la Iglesia católica.
Así, la ceremonia de inauguración, celebrada recientemente, fue presidida por destacadas personalidades como el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, la directora general de Patrimonio de la Xunta, Carmen Martínez Insua, y el arzobispo de Santiago, Francisco José Prieto. Este acto no solo marcó la apertura oficial del pabellón revitalizado, sino que también subrayó la importancia de la colaboración institucional en la conservación y promoción del patrimonio histórico de Galicia.
PROYECTO
El proyecto se centró en la rehabilitación y restauración del Pabellón Historicista para revitalizar su función cultural, basándose en tres valores clave: sostenibilidad, estética e inclusión, y respondiendo a los desafíos del Pacto Verde Europeo. La intervención recuperó la arquitectura original de este tipo de construcción, liberando los espacios ocupados y destacando el lenguaje arquitectónico que combina la versatilidad de un espacio diáfano con un estilo vinculado a las tendencias europeas de la época.
Se consolidó la estructura existente de hierro fundido y cerchas de madera, restaurando las columnas y ménsulas originales con acero laminado, así como la cubierta metálica. El cierre del espacio incluyó una carpintería de madera retranqueada de la fachada principal, preservando la estructura de fundición. Un cerramiento diáfano con celosías de madera permite controlar la luz y la temperatura interior. Además, se añadió una entreplanta retrasada de la fachada principal para ampliar la capacidad expositiva, manteniendo la estructura espacial original marcada por pilares y cerchas. La entreplanta, de madera contralaminada estructural, se apoya en el muro perimetral y cuelga de tirantes de acero sujetos a las cerchas de madera, integrándose armoniosamente con los materiales originales del edificio.
HISTORIA
El Pabellón fue construido en el siglo XIX durante el funcionamiento del Seminario Mayor, posiblemente en relación con las Exposiciones Regionales de 1858 y/o 1909, debido a la colaboración de los espacios de San Martín Pinario. El claustro procesional del monasterio se consideró adecuado para la sección cultural de estas exposiciones, y el Pabellón pudo haberse utilizado para este propósito y como un espacio adicional para el Seminario en etapas posteriores. Su construcción reflejaba el deseo de ofrecer el inmueble, destacando su singularidad y recorrido histórico, así como sus características de uso, artísticas y arquitectónicas, participando activamente en las Exposiciones Regionales.
Antes de su restauración, este se usaba para actividades prácticas de cantería y carpintería, y como almacén. La mitad norte estaba abierta y utilizada como depósito o taller de cantería, con una celosía de ramas vegetales en la fachada oeste, apoyada en la estructura de hierro fundido original. Hacia el sur, el Pabellón estaba tapiado con albañilería y se usaba para almacenamiento y carpintería, con un área dividida en dos plantas, mientras que había también dos construcciones anexas fuera del volumen original, lo que desviaba su protección cultural original.
FINANCIACIÓN Y COLABORACIÓN
Por su parte, el coste total de la rehabilitación ascendió a 1,34 millones de euros, financiado por diversas entidades. La Archidiócesis de Santiago informó que la obra fue posible gracias a una inversión mayoritaria del Gobierno central, que aportó el 75% del presupuesto total, un compromiso financiero que refleja el interés compartido en preservar y revitalizar los tesoros culturales que enriquecen el tejido histórico y social de la capital gallega.
Durante la ceremonia, Pedro Blanco destacó la importancia de este proyecto para Santiago, afirmando que el pabellón restaurado enriquece el patrimonio histórico de la ciudad y ofrece a residentes y visitantes un nuevo espacio cultural y de uso público. El arzobispo de Santiago, por su parte, expresó su deseo de que el pabellón se convierta en un punto de referencia para la vida cultural de la ciudad, agregando una dimensión nueva y dinámica al legado arquitectónico del monasterio.
Por su parte, la directora general de Patrimonio, Mª del Carmen Martínez, también destacó la importancia estratégica del monasterio de San Martín Pinario para la Xunta de Galicia, subrayando los esfuerzos continuos para preservar y promover este sitio declarado Bien de Interés Cultural (BIC).
En esta línea, además del pabellón, otras iniciativas de rehabilitación están en marcha en Santiago, financiadas por programas como el 2% Cultural del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana. Estas incluyen la restauración del Pazo de Raxoi y el Hostal dos Reis Católicos, ambos proyectos significativos que, según destacó el delegado del Gobierno reflejan el compromiso continuo del Gobierno con la conservación del patrimonio histórico de la ciudad.