29 octubre, 2024
Yolanda Díaz continúa empeñada en huir hacia adelante y despegarse de toda responsabilidad para con ese gran extraño para ella llamado Íñigo Errejón. El último episodio de esto lo vivimos el lunes, cuando esta ha insistido en que actuó “con contundencia y prontitud” al pedirle a este su dimisión, afirmando que supo de la denuncia el pasado martes y que, al día siguiente, ya había solicitado la salida del exportavoz de Sumar.
Sin embargo, la líder de la coalición también reconoció que ya conocía una denuncia anónima del pasado 2023, pero se justificó diciendo que Más Madrid cerró esa investigación. Sí vamos, que primero no se sabía, luego resulta que un poco, ahora empezamos a entrever que todo el mundo lo sabía y, a estas alturas, ¿quién no puede dudar ya que esto era simple y llanamente todo un secreto a voces?».
Lo único que es completamente cierto es que el pasado 2023 al Señor Errejón se le dio un puesto en las listas electorales y más tarde se le premió haciéndole portavoz de un partido que cogobierna España. Ese que hasta hace bien poco lideraba la Señora Díaz.
Y bueno, ya si queremos completar del todo el propio ‘cóctel Díaz’, también podríamos recordar aquel otro turbio episodio del que, en su momento, también la gallega dijo de nuevo no saber absolutamente nada al respecto.
Para quienes no recuerden, en 2016, Ramiro Santalices, un asesor estrechamente vinculado a Yolanda Díaz desde su etapa en Esquerda Unida, fue detenido en las instalaciones del Parlamento gallego por posesión y distribución de material pedófilo. Siete años antes de eso, en 2009, dos militantes de Izquierda Unida en Ferrol denunciaron buscas de contenidos pedófilos en un ordenador de la sede local, señalando cómo posible responsable al propio Ramiro Santalices., asesor con acceso al edificio. Al comunicar el caso a los superiores, incluida la coordinadora Yolanda Díaz, y ante la falta de acción, decidieron presentar la denuncia a la Policía. Posteriormente, EU inició una investigación interna, pero suspendió a los denunciantes de militancia y finalmente los expulsó, a pesar de su larga trayectoria en el partido.
Confiemos en que, ahora sí que sí, ya no queden más fantasmas en el ropero de Díaz…