3 abril, 2024
La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de A Coruña ha condenado a Abanca al pago de 3.300.000 euros a seis compradores de unas viviendas en la Costa del Sol que nunca recibieron los inmuebles, al considerar el juez al banco responsable del pago por haber avalado la operación a la inmobiliaria que iba a construirlas.
Se trata de un caso que se remonta a 2004, en el que uno de los afectados es el internacional inglés y exentrenador del Chelsea Geoffrey Charles «Geoff» Hurst, campeón del mundo con Inglaterra en 1996, según se refleja en la sentencia y ha informado a EFE el bufete sevillano Salmerón, que se ha encargado de la defensa de los compradores.
Todos ellos, ciudadanos británicos, compraron hace 20 años sobre plano unas viviendas con la intención de residir en la Costa del Sol, concretamente en Marbella, en una urbanización que se iba a denominar ‘Aloha Royal’.
Sin embargo, la empresa constructora no pudo terminar las viviendas ni devolver el dinero depositado por los compradores, de modo que iniciaron un proceso judicial en el que denunciaron, entre otros, al banco que avaló la operación a la promotora, al considerarla responsable, a pesar de que los promotores de la obra no ingresaron en esa entidad el dinero de los compradores.
Los afectados alegaron contra una primera sentencia que dio la razón al banco, sosteniendo que, como refleja la sentencia, la promotora suscribió una línea de riesgo para la constitución de fianzas, «y la suscripción de dicha garantía se previó en los contratos de compraventa», además de que la entidad avalista tuvo la posibilidad de conocer las entregas a cuenta realizadas.
Asimismo, sostuvieron que la entidad avalista debe responder con independencia de que las cantidades no fueran depositadas en Abanca.
En base a todo ello, este tribunal considera que está probada la condición de avalista de la entidad demandada «de las cantidades entregadas a cuenta por los adquirentes en la referida promoción», así como las entregas a cuenta del precio previsto en los distintos contratos y el incumplimiento de la promotora a la hora de entregar las viviendas, con lo cual «se cumplen los requisitos necesarios para responsabilizar a la entidad Abanca del pago de las cantidades reclamadas», indica el juez.
Los afectados tendrán que recibir ahora los 3,3 millones de euros citados, a dividir en distintas cantidades entre ellos, según el dinero que pusieron en su día y los intereses que se han generado en los 20 años que han pasado desde la denuncia.
Para el Bufete Salmerón, la sentencia confirma el camino de aquellos compradores que se encuentran en la misma situación para que puedan reclamar judicialmente sus derechos contra las entidades bancarias.