El congreso de Maduro

Después del pucherazo de las elecciones del 28 de julio avalado ya por “su Tribunal Supremo”, el presidente Maduro se supera a sí mismo y anuncia un “congreso mundial” contra el fascismo “para intercambiar estrategias y combatir esta ideología” de la que, dice, asegura, infectada la oposición.

«Vamos a hacer aquí en Venezuela el epicentro mundial de la lucha contra el fascismo, el gran congreso… para nutrirnos de las ideas, las propuestas y afinar las estrategias de Venezuela, que está defendiendo su derecho a vivir, a la paz, al futuro», anunció en una reunión con dirigentes de su partido. El fascismo es el odio, la intolerancia convertida en violencia”, dijo ante simpatizantes y funcionarios que apoyaron su “victoria”, cuestionada dentro y fuera del país.

“Sorprenderse, extrañarse, es empezar a entender”, dijo don José Ortega, y uno no sale de su asombro. Por eso, para enmarcar mejor el alcance del Congreso del autócrata venezolano releo en un trabajo del historiador Juan Pablo Fusi la descripción y principales atributos del fascismo tradicional: autoritarismo y represión de la oposición, control sobre la economía, retórica nacionalista y antiimperialista, culto a la personalidad del líder, uso de la propaganda para mantener lealtades y apoyos y de la violencia con milicias paramilitares para intimidar y reprimir a la oposición…

Reparen que en su mayoría son los mismas atributos que caracterizan al régimen de Venezuela ya que son más las similitudes y coincidencias del modelo autocrático y represor de Maduro con el fascismo clásico que las diferencias.

Volviendo al congreso anunciado, Maduro pidió a los organizadores que inviten a personalidades de todos los continentes, a pensadores, intelectuales, artistas, dirigentes sociales y líderes políticos, sin mencionar nombres concretos. Por tanto, ahí estarán representantes acreditados de regímenes hermanos, como Nicaragua, Cuba, Rusia, Corea del Norte o China. España enviará una nutrida representación capitaneada por Zapatero en la que figurarán nombres conocidos de la “gauche divine” que mostró sus simpatías por el chavismo. Los nombres son conocidos.

Ahora dejen volar su imaginación… Un congreso contra el fascismo organizado por Nicolás Maduro será como una reunión de pirómanos arremetiendo contra los bomberos. En el programa de las jornadas habrá talleres sobre cómo identificar el fascismo… sin que los asistentes se vean reflejados en ese espejo. Y los paneles de discusión serán un espectáculo: todos explicando cómo combatir la tiranía mientras Maduro asegura que la única democracia verdadera es la que él encabeza y los ponentes representan.

En la clausura, después de horas fustigando al fascismo, todos aplaudirán al líder Maduro que hizo posible el evento. Y se irán satisfechos de sus aportaciones para fortalecer sus totalitarismos. ¡Qué tropa!.