25 septiembre, 2024
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha calificado este miércoles la posible quita de la deuda autonómica como un «negocio ruinoso» para Galicia, durante una acalorada sesión de control en el Parlamento gallego. En el debate, la líder del BNG, Ana Pontón, y el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, lo acusaron de engañar a los gallegos y de poner los intereses del Partido Popular por encima de los de la comunidad en la negociación sobre la financiación autonómica.
El tema de la financiación de Galicia y una posible quita de deuda ha sido motivo de fuerte discusión desde que, en el marco de las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez, surgieron propuestas para condonar parte de la deuda de comunidades autónomas como Cataluña. Alfonso Rueda ha sido firme en su rechazo a cualquier negociación que implique una quita para Galicia, argumentando que la comunidad, una de las menos endeudadas de España, no debería asumir los costos de las regiones más endeudadas.
En su intervención en el Parlamento, Rueda subrayó que una posible condonación sería extremadamente perjudicial para Galicia. «No podemos aceptar un chantaje que implica que cada gallego pague 495 euros para liberar al independentismo catalán de sus deudas», afirmó el presidente gallego, en clara referencia a Cataluña. Según sus cálculos, la deuda de esta comunidad es 32 veces mayor que la de Galicia, lo que resultaría en un agravio comparativo para los gallegos. “Intercambiar nuestra deuda por la de otros es un negocio ruinoso”, insistió Rueda.
CRÍTICAS DE PONTÓN
Por su parte, Ana Pontón, portavoz del BNG, acusó a Rueda de actuar en defensa de los intereses del Partido Popular y no de Galicia. «Usted fue a la reunión con Pedro Sánchez con el uniforme de militante del PP, no con el traje de presidente de Galicia», reprochó Pontón. La líder nacionalista le instó a negociar con el Gobierno central, pero no para rechazar la quita de deuda, sino para asegurar que Galicia «tenga la llave de su propio dinero», refiriéndose a una mayor autonomía financiera para la comunidad.
Pontón también criticó a Rueda por lo que considera un comportamiento sumiso ante el centralismo de su partido. «¿Cómo puede no ser beneficioso para Galicia reducir la deuda cuando estamos pagando más intereses que lo que se gasta en sanidad o educación?», cuestionó la líder del BNG. Pontón concluyó instando a Rueda a «rectificar» y a no «entregarse al egoísmo del centralismo madrileño» del Partido Popular.
BESTEIRO HABLA DE «POBREZA ARGUMENTAL»
A las críticas de Pontón se sumó el líder del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, quien también reprochó a Rueda su postura en materia de financiación autonómica. Besteiro ironizó con que, pese a que el presidente gallego quedó en llevarlo a Madrid para abordar la transferencia de la AP-9, finalmente no lo hizo, lo que le provocó una reflexión irónica: «Para el papel que hizo, prefiero no estar allí».
El líder socialista también atacó lo que llamó «baile de cifras» por parte de la Xunta sobre la supuesta infrafinanciación de Galicia. En los últimos días, según Besteiro, la Xunta ha presentado diversas cifras, lo que para el socialista demuestra la «insolvencia» del Ejecutivo gallego en la defensa de los intereses de la comunidad. «Rueda ha demostrado una pobreza argumental alarmante», criticó.
Besteiro reprochó además a Rueda que mientras rechaza una financiación singular para Galicia, sí la acepta para el proyecto de la planta de Altri en Palas de Rei (Lugo). Para el socialista, esto pone en evidencia una doble vara de medir en el discurso del presidente gallego.
RUEDA DEFIENDE LA GESTIÓN
En su réplica, Alfonso Rueda se mantuvo firme en su defensa de la postura de la Xunta. Reiteró que Galicia es una de las comunidades autónomas mejor gestionadas en términos de deuda y que no necesita «intercambiar su buena gestión por la mala de otras comunidades». Asimismo, arremetió contra Ana Pontón, acusándola de seguir las pautas del independentismo catalán. «Si sigue con este camino, pronto cambiarán las muñeiras por sardanas», ironizó.
El presidente gallego también respondió a las críticas de Besteiro, sugiriendo que el líder socialista fue devuelto a Galicia porque no estaba a la altura en Madrid. «A usted lo mandaron de vuelta aquí, así que si lo llevo de vuelta no sé la cara que se le iba a poner a su jefe», le espetó.
Por último, Rueda defendió que la Xunta está centrada en conseguir una financiación más justa para Galicia, y que lo importante es negociar un nuevo sistema de financiación autonómica multilateral, donde Galicia pueda reclamar los 700 millones de euros anuales que, según sus cálculos, necesita para paliar su déficit de recaudación fiscal. Para él, esta es la prioridad, no «negocios ruinosos» como la quita de deuda.