
22 octubre, 2025
Las 161 bodegas adscritas a la denominación de origen Rías Baixas han cerrado una vendimia que califican como «histórica», al haber recogido más de 47,5 millones de kilos de uva, un 12,74% más que en la campaña de 2024.
Rías Baixas, que ha conseguido esquivar el ataque de mildiu que sufrieron muchas otras regiones vínicolas, subraya que, tras un ciclo de maduración «idóneo», la vendimia ha sido «abundante» y ha estado caracterizada por la «alta calidad» de la uva recogida.
El buen estado sanitario y de maduración de la uva, así como su gran calidad, según el director técnico de la denominación, Agustín Lago, permitió que la vendimia fuese «tranquila», salvo «algunos trastornos» que se vivieron por las lluvias durante el mes de septiembre.
El consejo regulador estima que, con este volumen de uva, se podrán conseguir unos 32,8 millones de litro de vino, lo que les permitirá atender «e incluso aumentar» sus ventas en el mercado nacional e internacional.
Las primeras valoraciones de los enólogos hacen que las expectativas de Rías Baixas para los vinos de la añada 2025 sean «muy halagüeñas», tanto en calidad como en cantidad.
Las variedades blancas representaron el 99,50% de la uva recogida, abanderada por la albariño, que llegó a los 46 millones de kilos, el 96,99% del total, seguida por la caiño blanco (0,90%), la loureira blanca (0,64%) y la godello, que este año superó a la treixadura.
Esta campaña fue, además, la primera vendimia de la variedad ratiño, con 901 kilos.
Por su parte, las variedades tintas supusieron el 0,50% del total, con la variedad sousón como la principal, seguida por la caiño tinto y espadeiro.
En cuanto a la producción por subzonas, O Salnés continúa siendo la de mayor producción, con un 65% del total, seguida por el Condado do Tea, con un 18,36%, y O Rosal, con el 8,77%.
El rendimiento medio en cada una de las 4.808 hectáreas de superficie productora de Rías Baixas fue de 9.881 kilos, un valor algo superior a la media de los últimos diez años, fijada en 9.072.
En esta vendimia, que arrancó el 20 de agosto en la subzona de O Condado do Tea, fue realizada a mano por los 4.960 viticultores inscritos en la denominación de origen Rías Baixas.