Masiva participación del profesorado gallego en la segunda jornada de huelga

Galicia vivió hoy la segunda jornada de huelga docente del curso, con una asistencia que superó todas las previsiones en las cuatro capitales de provincia, demostrando que el malestar del profesorado con las políticas de la Consellería de Educación es profundo y persistente. Esta movilización se suma a la del pasado 25 de septiembre y a la del lunes en Santiago de Compostela, donde numerosos docentes ya habían mostrado su rechazo a la gestión educativa de la administración autonómica.

A pesar de la lluvia y del esfuerzo económico y laboral que supone secundar las huelgas, el profesorado gallego respondió de manera masiva a la convocatoria de la CIG-Enseñanza, una de las organizaciones sindicales convocantes. Las marchas finalizaron frente a las sedes de la Consellería, donde se leyó un manifiesto que reclamaba un cambio radical en las políticas educativas y el fin de los recortes que han marcado los últimos quince años.

En A Coruña, la manifestación partió del Colegio Alborada a las 11:30 horas, después de que un grupo de cuarenta docentes pernoctara en el centro para visibilizar el conflicto. La marcha, que afectó la circulación en el centro de la ciudad, concluyó frente al edificio administrativo de la Xunta en Monelos. Xela Armas, representante de la CIG-Enseñanza, destacó la histórica dimensión de la lucha: “El profesorado gallego no abandonó la lucha ni el pulso a la Consellería durante todos estos años y esta fuerza nos tiene que llevar a sentirnos satisfechos”.

En Pontevedra, la marcha recorrió la ciudad desde el Instituto Valle Inclán, donde un grupo de medio centenar de docentes también pasó la noche. Tamara Martínez, secretaria comarcal de la CIG-Enseñanza, leyó un fragmento del manifiesto subrayando que la lucha actual busca garantizar la igualdad y la calidad de la enseñanza pública. Entre las principales reivindicaciones se encuentra la reducción de ratios, que la administración ha planificado de forma gradual hasta 2032 en primaria y 2027 en secundaria, así como la disminución de la carga burocrática, especialmente en centros integrados de FP y escuelas artísticas.

En Ourense, la manifestación tuvo un recorrido circular con salida y llegada frente a la Delegación Territorial. Elena Añel, de la ejecutiva de la CIG-Enseñanza, recordó que estas demandas van ligadas a la mejora de la equidad educativa, la atención al alumnado y la dignidad profesional del profesorado. “Está en juego el futuro de nuestra sociedad, la transmisión de lengua, cultura y valores de convivencia en paz”, subrayó.

Finalmente, en Lugo, la marcha partió de la Huerta del Seminario y culminó frente a la Delegación Territorial de Educación. Laura Enrojezco, secretaria nacional de la CIG-Enseñanza, alentó al profesorado a mantener la unidad y la presión sobre la Consellería, destacando la fuerza alcanzada en menos de dos meses de curso: “Tenemos que seguir socializando el conflicto, uniendo nuestras demandas con las de alumnado y familias, y haciéndonos respetar en todos los ámbitos. La lucha es la razón, y nosotros la tenemos toda”.