9 septiembre, 2024
El periodista Xavier Navaza Blanco, nacido en Lalín en 1948, fallecía este lunes, día 9 de septiembre, a los 76 años de edad. Los servicios funerarios se realizan en los Velatorios de Lalín (Avenida de Buenos Aires, 26), desde donde, a las seis de la tarde del martes, saldrá el cortejo fúnebre hasta la iglesia de Santa María de las Dolores de la capital del Deza, donde tendrá lugar el funeral de cuerpo presente. El fallecido será incinerado en la intimidad familiar.
Estudiante en Ferrol de Ingeniería Técnica Naval, Xavier Navaza se trasladaría a Barcelona donde comenzó a colaborar en el periódico Tele/Expres de la capital condal realizando al propio tiempo los estudios de Ciencias de la Información en la Universidad Autónoma de dicha ciudad, donde se licenció con una muy alta calificación, consecuencia de un expediente brillante.
Durante esa etapa realizó reportajes para alguna de las revistas de mayor difusión en la Transición política, caso de Interviú, La Calle y Actual. De regreso a Galicia, fue cofundador de la revista Teima, además de corresponsal de los diarios El Periódico, Pueblo e Informaciones. Tras la constitución del Gobierno gallego, fue nombrado jefe del gabinete de prensa de la Xunta de Galicia donde permaneció durante diez largos años, hasta 1990,
Su siguiente paso profesional se dio en Pontevedra, como subdirector de Xornal Diario, además de poner en marcha distintos programas para la Televisión de Galicia, singularmente el reconocido Etcétera con el compostelano Luis Mariño.
Sus últimos años de carrera profesional los desarrolló en el periódico compostelano El Correo Gallego.
Entre sus libros se encuentran Disparos (1991), Sumud. Conversa con Palestina (2003), La guillotina del centro (2005), La conjura de Raxoi (2007) y El último amante de Marilyn (2012).
Su extraordinaria perspicacia y conocimiento de la clase política gallega, con la que convivió de modo tan próximo a lo largo de diez años, le llevaron a escribir las más agudas y admiradas crónicas del comienzo de la Autonomía gallega, en las que destacaban tanto los conocimientos de la trastienda de las distintas formaciones como su fino olfato para saber anticiparse a movimientos y coaliciones que él supo adivinar antes que nadie.
Por eso en sus documentados trabajos está una parte nada desdeñable de las vicisitudes que Gobierno y Parlamento gallegos hubieron de atravesar para la consolidación definitiva del autogobierno.
Un desgraciado acontecimiento familiar –el repentino fallecimiento de su esposa de regreso de un viaje de fin de semana de Lalín a Santiago- no aminoraron su ánimo por el desfallecimiento al que supo sobreponerse con entereza, aunque le marcaría para el resto de sus días.
Dotado de un fino sentido del humor en el que la retranca hacía permanente acto de presencia, supo conciliar la amistad con políticos de la más variada ideología, que admiraban sus documentados trabajos periodísticos.
Descanse en paz y las condolencias de DIARIO DE SANTIAGO para sus familiares, una conocida familia lalinense, entre los que se cuenta el renombrado escritor y catedrático de la Universidad de Vigo, Gonzalo Navaza.
Asociaciones profesionales de Santiago y Galicia hicieron públicos comunicados de condolencia, a la par que anunciaban el fallecimiento del destacado profesional del periodismo.