Una de las más deslumbrantes etapas del peregrinaje en la Vía Céltica hacia Santiago de Compostela inicia en Caión, que al igual que Malpica alguna vez fueron importantes puertos balleneros. La caza de ballenas era realizada por pescadores vascos y caionenses entre los siglos XVI y XVIII, centrándose los enormes cetáceos que llegaban a esta bella franja del mar: dicha actividad generó un importante movimiento comercial en la zona, siendo una importante fuente de trabajo para los habitantes de Caión y localidades cercanas.
Más adelante en el recorrido en la localidad merece la pena visitar el Pazo Dos Condes de Graxal, que data del año 1494 y también la iglesia de Santa María do Socorro, que formó parte del convento de Santo Agostiño (construido poco después, en el siglo XVI). Siguiendo rumbo a Leira, allí encontramos la iglesia de San Salvador de Rebordelos y posteriormente la histórica iglesia de San Cristovo de Lema, en uno de los espacios naturales más importantes del norte gallego. Ya en Castrillón, la ermita de Santa Irene nos espera con una vista espectacular de la costa de Baldaio.
Siguiendo el camino costero de Razo nos encontramos con la ermita de Santa Mariña do Mar, de construcción más reciente: se encuentra fechada en 1948 y también merece una visita. Ya en el límite entre los municipios de Carballo y Malpica de Bergantiños se encuentra el magnífico Monte Neme que alberga un patrimonio arqueológico muy singular, ejemplificado por la Eira Das Meigas un extraordinario círculo lítico orientado hacia el sol naciente y a cuyos pies se encuentra el Camino original.
Iglesia Santa María do Socorro en Caión
En A Trémoa, Pedrosa llegaremos a la Iglesia de Santa María de Leiloio, donde Benigno Cortés García ubicó dos capiteles prerrománicos. Este templo fue propiedad de los Condes de Traba hasta mediados del siglo XII, cuando María Fernández de Traba donó su parte al Cabildo de Compostela. Los capiteles presentan una decoración poco común en la comarca de Bergantiños y por ellos estimamos que la fábrica romana de Leiloio se levantó en las últimas décadas del siglo XII. Leiloio fue, junto con de Buño, otro de los centros de producción cerámica: según el Censo del Marqués de Ensenada de 1753, por entonces había 27 alfareros y 8 alfareros. Desde aquí continuamos hasta Buño, uno de los focos tradicionales de la cerámica del noroeste de la península ibérica. Por lo general, los barros de esta localidad son de alta calidad y muy valorados respecto a la de otros centros productores. La obra de sus «oleiros y cacharreiros» y sus alfares, primitivos obradores instalados en la cocina de la vivienda, fueron inmortalizados en la pintura costumbrista de Fernando Álvarez de Sotomayor.
Y como no podría ser de otra manera, la olería de Buño obviamente se encuentra presente en la Vía Céltica en la señalización de este Camino. Antaño parada obligatoria para los caminantes que llegaban desde la costa de Bergantiños, aquí confluyen dos rutas de la Vía Céltica desde Malpica y Caión. Jerónimo del Hoyo, en sus memorias de 1607, señala por entonces la existencia de la «Ermita-Hospital de Santa Catherina” que se encontraba en ruinas hacia el año 1594. Y ya en 1571, la floreciente industria artesanal, que incluía alfareros pero también zapateros y herreros se justificaba por la existencia de un camino francés entre Malpica y Buño. La tradición alfarera ha perdurado hasta nuestros días y vale la pena visitar el Forno do Forte, que estuvo en funcionamiento hasta los años 60 y que hoy ha sido restaurado en forma de EcoMuseo.
Alfarería local en el EcoMuseo de Forno do Forte
Dicho espacio, que nace como resultado de la necesidad de exponer al público la tecnología y la manera de vida tradicional de los “oleiros” locales, está formado por las antiguas casas taller y sus hornos y hórreos: Forno do Forte es uno de los conjuntos etnográficos más emblemáticos de la zona, levantado a lo largo de los s. XVIII-XIX en lo que fue una casa labriega de gran tamaño con varios apartados que se alquiló a alfareros y jornaleros. Para atraer a los alfareros construyó un cobertizo (alpendre de grandes dimensiones) donde podían guardar barro, tojo y otros objetos. También levantó un horno, indispensable para que pudieran cocer. Actualmente, cuidado al detalle con el fin de ofrecer al visitante la posibilidad de retroceder en el tiempo como era la vivienda de un alfarero, además brinda la experiencia de trabajar en un torno y elaborar una pieza de barro con nuestras propias manos.
De esta manera, entre paisajes naturales, impactantes vistas al mar, iglesias medievales, círculos líticos y museos que homenajean las labores artesanales de los pobladores de antaño, la etapa entre Caión y Buño se consolida como una de las más atractivas y bonitas de la mágica Vía Céltica.
Vista general de Caión
Compartir
Te puede interesar...
Killo, el borrego mascota de La Legión, durante el tradicional desfile del Día de la Fiesta Nacional por el Paseo del Prado de Madrid. Foto: EFE/Daniel González.
Utilizamos cookies propias y de terceros para optimizar nuestro sitio web y nuestro servicio.
Funcionales
Siempre activo
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario para el propósito legítimo de permitir el uso de un servicio específico explícitamente solicitado por el abonado o usuario, o con el único propósito de llevar a cabo la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
Preferencias
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para la finalidad legítima de almacenar preferencias no solicitadas por el abonado o usuario.
Estadísticas
El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos.El almacenamiento o acceso técnico que se utiliza exclusivamente con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por parte de tu Proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito no se puede utilizar para identificarte.
Marketing
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad, o para rastrear al usuario en una web o en varias web con fines de marketing similares.