6 septiembre, 2024
Tras la organización territorial de España en provincias en 1833, obra de Javier de Burgos bajo la regencia de María Cristina de Borbón, en 1858 la reina Isabel II inició distintos viajes por la geografía española para conocer más de cerca los dominios de su reinado. Uno de esos viajes fue el que realizó por las principales poblaciones de Castilla, León, Asturias y Galicia y que, en esta Comunidad Autónoma, incluyó las localidades de Ferrol, A Coruña, Santiago, Betanzos y Lugo.
El 7 de septiembre la comitiva real abandonó A Coruña para dirigirse a Compostela a donde arribó a última hora de la tarde. Formaban la comitiva que acompañaba a la reina el rey consorte, don Francisco de Asís de Borbón, y sus hijos la infanta María Isabel, de 7 años, y el futuro rey Alfonso XII, de solo un año de edad, además de destacados miembros del Gobierno hasta un número que sobrepasaba el medio centenar.
La comitiva hizo su entrada, a última hora de la tarde, por la calle San Roque para dirigirse a Platerías, recorrido que realizaron en medio de un atiborrado público que llenaba las calles y donde no faltaban las oportunas decoraciones de escudos, estandartes o los tan recurrentes arcos de triunfo.
Los reyes entraron en la catedral donde asistieron a un Te Deum, para dirigirse seguidamente, por la puerta del Obradoiro, al Seminario de Confesores –actual Pazo de Rajoy- donde habrían de hospedarse hasta su marcha, el día 10.
Al día siguiente, siempre vitoreados por una gran muchedumbre y en medio de celebraciones de especial solemnidad, se dirigieron a la catedral, a través del Pórtico de la Gloria, donde asistieron a la celebración litúrgica. Concluida esta, visitaron la Capilla de las Reliquias, donde fueron obsequiados con distintos regalos por el cabildo, además de contemplar, detrás del altar mayor el gallardete de la nave capitana de la batalla de Lepanto que Juan de Austria entregó a la basílica.
Por la tarde, recepción real a las autoridades, detenida visita a las instalaciones del Gran Hospital Real, visita a la alameda y cena de homenaje.
Ya el día nueve, la agenda real contempló misa en la catedral y detenido recorrido por sus capillas, solemne visita a la Universidad, recorrido por la Casa-Hospicio, visita al templo de Santo Domingo y a San Martín Pinario, donde estaba instalada una Exposición Artística e Industrial de Galicia.
Por fin el día 10, misa en la catedral, visita a San Francisco y regreso a sus aposentos para, a las tres de la tarde, emprender viaje de regreso hacia A Coruña.
1134.- El rey Alfonso I de Aragón donó en su testamento a la iglesia de Santiago de Galicia la ciudad de Calahorra y las villas de Cerber y Turtullón.
1890.- Banquete político presidido por Castelar en la Reunión de Artesanos de A Coruña.