Canonización del misionero franciscano gallego Francisco Blanco

Xoán del Río

1862.- El Papa Pio IX canoniza como santo de la Iglesia Católica al misionero franciscano gallego Francisco Blanco. Previamente, el 14 de septiembre de 1627, el Papa Urbano XVIII había proclamado su beatificación. La Iglesia le dedica el día 6 de febrero de cada año bajo el epígrafe de “San Pablo Miki y compañeros”.

Francisco Blanco nació en A Gudiña, en su parroquia de Tameirón, Ourense, el 18 de septiembre de 1570 y estudió con los Jesuitas de Monterrey. Después de mudarse a Castilla y León se convirtió en un novato con los Franciscanos de la orden en Villalpando.

Tras una llamada a una misión cultural emigró a la Nueva España, donde fue ordenado sacerdote. En 1593 se trasladó a Filipinas y en 1596 viajó, con su maestro Martín de la Ascensión, a Japón.

El daimio (jefe de la aristocracia local) Toyotomi Hideyoshi comenzó a perseguir a los católicos debidos al miedo de la creciente influencia europea. El 8 de diciembre de 1596 Blanco fue detenido con un gran número de cristianos de monasterios cercanos en Kioto. El 4 de enero de 1597 fueron enviados en una marcha forzada de 966 kilómetros a Nahasaki. Al día siguiente, Blanco y otros veinticinco cristianos, hombres y niños (incluyendo 20 japoneses, 4 europeos, un mexicano y un indio) fueron ejecutados por predicar el cristianismo, un acto prohibido por la ley japonesa. Fueron crucificados y atravesados con lanzas en la Colina Nishizaka, y sus cuerpos quedaron expuestos.

Cuando la libertad religiosa fue restablecida en Japón bajo la Restauración Meiji en 1868, unos 30.000 miembros de los Kakure Kirishitian salieron de sus escondites.

En junio de 1962 se construyeron un museo y un monumento a los mártires sobre la Colina de Nishizaka para conmemorar el 100 aniversario de su canonización. Un cráneo reliquia de Blanco se conserva en O Barco de Valdeorras.

1702.- Llega a Coruña la escuadra francesa que libro milagrosamente del encuentro de la inglesa y holandesa que recorrían la costa amagando algún ataque.

1456.- D. Rodrigo de Luna, arzobispo de Santiago, confirma la sentencia. que dictó en 17 de Enero de 1449 el juez de su villa de Pontevedra, eximiendo del pago de alcabala a los carpinteros que en dicha villa construían barcas y navíos.

1809.- En Puente Caldelas y por el regimiento de Lobera, de que era coronel D. José Joaquín Márquez, fue atacado desde las once y media de la mañana hasta las siete de la tarde, y vencidos, 4.000 soldados de infantería y 1.000 de caballería del ejército francés en lo que no era ya sino el rescoldo de la lucha contra Napoleón en Galicia, vencido días atrás en Ponte Sampaio.

1813. El decreto de las Cortes de esta fecha, en cuanto se refiere a los arrendamientos sin tiempo determinado y al desahucio de los colonos, declara que no hace novedad alguna en la actual constitución de los foros de Asturias y Galicia.