22 agosto, 2024
En un contexto de récord de turismo y de viajeros e incluso de protestas por la sostenibilidad del modelo, el turismo rural convive con momentos puntuales de exceso de demanda, si bien afecta solo a localidades muy concretas y en periodos muy cortos de tiempo.
Según las fuentes consultadas por EFE, aunque son situaciones muy esporádicas, hay veces que no se puede cubrir la alta demanda de viajeros con servicios de calidad.
Además de playas abarrotadas, el verano está dejando patente situaciones de cierta saturación en algunos destinos rurales, en rutas de peregrinación como el Camino de Santiago y en espacios cercanos a enclaves naturales y frescos.
El presidente de la Asociación Española de Turismo Rural (Asetur), Pedro Carreño, ha explicado que en España hay aproximadamente 8.000 pueblos con unas 15.000 casas de alojamiento rural, lo que supone una media de dos casas por pueblo y «eso nunca podría ser saturación».
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, hasta junio han aumentado un 2,29 % las pernoctaciones de turismo rural y un 3,23 % los viajeros, con una estancia media de 2,45 días que cae casi un punto en el primer semestre.
No obstante, algunos pueblos de España sí tienen una demanda que les supera en verano, donde coinciden fiestas, los residentes habituales, se llenan las casas de las familias que sólo las usan en esta temporada y llegan además los turistas que pernoctan, una realidad para la que los pueblos «no están preparados», ha reconocido.
Sin embargo, ayuda a recuperar el «pulso» de los pueblos que durante el resto del año están vacíos, es «muy puntual» y está motivado por el gusto de muchas familias de «volver al pueblo, a su esencia».
Una de las consecuencias para la población local es que muchos se sienten «extraños en su propio pueblo, porque no conocen a nadie».
A su juicio, hay que buscar un equilibrio que permita que todos puedan disfrutar y que «el turismo siga llegando y aportando a esos lugares lo que necesitan».
Por su parte, el presidente de la Asociación de Profesionales de Turismo Rural (Autural), Francisco Parra, ha explicado a EFE que la alta demanda se da en algunos territorios, particularmente ligados a parajes naturales, porque el turismo se ha convertido en un producto cada vez más fácil de consumir.
Y ha aseverado que «hace falta sitio» para todo ese consumo, mientras que las pequeñas poblaciones cuentan con una capacidad limitada de acogida.
Actualmente, hay una gran demanda con familias que llegan en busca de todos los servicios, que, «a veces no están o están limitados».
Como consecuencia, la producción local no es suficiente para abastecer la demanda y hay que «traer producto de fuera», lo que provoca que lo local «pierda protagonismo, así como la identidad y las raíces», ha reconocido.
Una de las razones para que un destino rural se convierta en un ‘boom’ es la promoción y, por ello, hay que acompañar estas campañas para atraer viajeros con los servicios que necesitan una vez en destino, ha defendido.
El peculiar territorio de Las Médulas (León) ha experimentado un crecimiento de demanda turística en los últimos años, pues reciben 200.000 visitantes para poblaciones rurales que apenas llegan a 500 habitantes como las pedanías de Carucedo, Orellán y Las Médulas.
Así se desprende de un estudio desarrollado por los investigadores Brais X. Currás y Almudena Orejas del Instituto de Historia del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la empresa Kido Dynamics y el grupo de Estructura Social y Territorio – Arqueología del Paisaje.
Según el experto, es un turismo que se concentra solo en los meses de verano y en días aislados como puentes y Semana Santa, lo que produce un «desequilibrio en el resto del año», ha precisado a EFE.
Y como respuesta, se hace aún más necesario fomentar una mejor planificación y gestión del territorio para diversificar la oferta en otros puntos de interés de cara a que el turismo no se concentre.
Esta temporada también se han hecho virales la situaciones de la hostelería rural, con bares que incluso han decidido cerrar ante el incremento de población y de clientes no siempre bien educados.
Las redes sociales es el mundo en el que se mueve el camarero y la persona detrás de la cuenta SoyCamarero, Jesús Soriano.
La estructural falta de personal en la restauración se traslada también a los municipios rurales con demanda turística y necesidades de perfiles como camareros o cocineros, entre otros trabajadores, que escasean porque en temporada «el alojamiento se dispara».
Con un añadido y es que en plena temporada alta de turistas en las zonas rurales, los bares y las terrazas locales generan ruidos, que se suma a la subida de precios en la zona por la alta demanda, que afecta y molesta a los vecinos.
Coincide en la receta para rebajar tensión: promocionar otros territorios «buenos, bonitos y baratos» para redirigir la oferta y que viajeros, población local y familias que vuelven a su tierra aunque sea puntualmente disfruten realmente de la vida rural.