31 octubre, 2025
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lanzó este viernes un contundente aviso sobre el avance de discursos que, a su juicio, pretenden “deslegitimar la democracia” y “falsear la historia”. Lo hizo durante el acto institucional de homenaje a las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura franquista, coincidiendo con el día oficial de recuerdo fijado en la Ley de Memoria Democrática. Ante casi una decena de ministros, Sánchez defendió el papel de la ciudadanía durante la Transición y alertó sobre una “labor lenta pero constante” encaminada, según dijo, a reescribir el pasado y debilitar las libertades actuales. En su intervención subrayó que “uno de cada cinco españoles” considera positiva la dictadura franquista, dato publicado por el CIS, y que atribuyó a una estrategia que “busca enturbiar nuestra historia para nublar nuestro presente, especialmente entre los jóvenes”.
Aunque sin nombrarlos directamente, el jefe del Ejecutivo apuntó a gobiernos autonómicos del Partido Popular que, con apoyo de Vox, han derogado leyes autonómicas de memoria democrática para sustituirlas por textos rebautizados como “leyes de concordia”. El presidente denunció que bajo ese eufemismo se intenta borrar episodios represivos, recordando que “en algunos edificios institucionales se torturó hasta el final”. Entre las referencias implícitas más directas, destacó el rechazo del Gobierno madrileño de Isabel Díaz Ayuso a declarar la Real Casa de Correos —actual sede de la Comunidad y antigua Dirección General de Seguridad durante el franquismo— como lugar de memoria democrática. “Esta ofensiva no solo busca falsear la historia”, advirtió Sánchez, “sino sentar las bases para demoler las libertades que tanto nos costó levantar”, garantizando además que su Ejecutivo no cederá “ni un ápice” ante estos intentos.
Coincidiendo con el 50º aniversario de la muerte de Francisco Franco, Sánchez anunció que el Gobierno acelerará el procedimiento para instar judicialmente la extinción de la Fundación Francisco Franco. El Ministerio de Cultura comunicó este mismo viernes el inicio formal del proceso. Asimismo, confirmó que el Consejo de Ministros aprobará el martes la concesión de la nacionalidad española a casi 170 descendientes de las Brigadas Internacionales, quienes la han solicitado al amparo de la Ley de Memoria Democrática. El acto, amenizado por actuaciones musicales y marcado por un minuto de silencio, sirvió para entregar declaraciones de reparación a familiares y supervivientes. Entre los homenajeados destacó María Luisa Ramos, de 98 años, exiliada en Francia y deportada al campo nazi de Mauthausen, quien recibió una prolongada ovación.
También intervino Laura García Lorca, sobrina del poeta Federico García Lorca, quien recordó que el asesinato del escritor granadino demostró que “la cultura y la libertad de pensamiento pueden ser perseguidas, pero no destruidas”. Otra de las protagonistas fue Ana Belén Pintado, víctima de los bebés robados en 1973. Su presencia motivó la protesta de una mujer que, desde el público, reclamó mayor atención para las madres que aún buscan a sus hijos. El listado de reconocimientos incluyó a figuras relevantes de la cultura y la resistencia democrática, como la pintora Maruja Mallo, el cineasta Luis Buñuel, la bibliotecaria y filóloga María Moliner, la atleta pionera Margot Moles y la militante comunista Josefina Samper. También fue recordado el sindicalista y anarquista Melchor Rodríguez, conocido como “el Ángel Rojo”; el religioso Diego José Paulino, asesinado al inicio de la Guerra Civil; y las doce costureras ejecutadas en el Barranco de Víznar (Granada).