5 agosto, 2024
La OCU ha denunciado a siete festivales de música al aire libre por prácticas consideradas abusivas, como cobrar por recuperar el saldo de pulseras, prohibir la entrada con comida y bebida del exterior o exigir pagos adicionales por salir y volver a entrar al recinto. Entre los festivales señalados por la organización se encuentran el Festival Internacional de Benicàssim (FIB), Monegros Desert Festival, Puro Latino, Sonórica, Zevra Festival, Bilbao BBK Live y Fortaleza Sound, los cuales en conjunto han congregado a cerca de un millón de asistentes.
Según la OCU, estas prácticas infringen los derechos de los consumidores, por lo que ya lo ha notificado ante las autoridades de consumo de sus correspondientes comunidades autónomas. Entre ellas, destaca por ejemplo el cobro por recuperar saldo en pulseras cashless, ya que todos los festivales denunciados imponen una comisión de entre 2 y 3 euros para recuperar el saldo restante en estas, con plazos cortos para la reclamación, lo que puede resultar en la pérdida del dinero no utilizado.
También denuncian que en festivales como el FIB, Fortaleza Sound, Puro Latino, Zevra Festival y Monegros Desert Festival, se cobra hasta 25 euros por volver a entrar al recinto después de salir, práctica que OCU considera una retención ilegal, al igual que la prohibición de acceder con comida y bebida del exterior, algo prohibido por festivales como Bilbao BBK Live, FIB, Fortaleza Sound y Monegros Desert Festival y que OCU considera abusivo, ya que la actividad principal del evento no es alimentaria.
En su denuncia esta apunta además a otra práctica habitual como cobrar por vasos reutilizables. Según señalan, En el FIB, se cobra 2.5 euros por un vaso reutilizable sin posibilidad de reembolso, mientras que en el Fortaleza Sound se ha observado incluso el alquiler de vasos para beber agua potable, una medida que podría causar problemas de hidratación y riesgos de aglomeraciones
«Por todo ello, OCU las ha denunciado ante las autoridades de consumo de las comunidades autónomas donde se han detectado estos abusos para que determinen si todas estas prácticas festivaleras son contrarias a las normas de protección de los consumidores. Y si es así, les pedimos que impongan las sanciones correspondientes y que obliguen a los promotores a devolver los importes que hayan cobrado indebidamente», señalan en un comunicado en el que instan al Ministerio de Consumo a desarrollar «una normativa homogénea sobre los derechos de los asistentes a este tipo de eventos, que establezca a su vez compensaciones automáticas en caso de malas prácticas»: